Mudarte a otra casa puede ser abrumador, independientemente de si es a la otra punta del país o al otro lado de la calle. Organizar, embalar, gestionar la logística y el viaje en sí, seguido del proceso inverso, es suficiente para que digas «¡Nunca más!».
No siempre tenemos el lujo de vivir en el mismo sitio, pero si dispones de un buen plan en el que detalles lo que tienes que hacer y cuánto tiempo te llevará cada tarea, puede suponer una gran diferencia. Una lista detallada de verificación de mudanzas te será de gran utilidad cuando llegue el día.
«Organizar todas las cosas que llevas guardando toda una vida puede llevarte tiempo. Reserva tiempo cada día para dedicarte a una de las tareas que tienes por delante, el armario, los cajones, una habitación, y no dejes que nada te distraiga».
—Amy Payne, experta en Evernote y organizadora profesional certificada
Cómo empezar
Las necesidades de cada persona a la hora de mudarse son distintas, de modo que también lo será la lista de verificación de mudanzas. Por esta razón, solo tú podrás elaborarla. No obstante, en casi todas las mudanzas hay fechas y decisiones críticas que pueden servirte de base para tu lista, independientemente de los detalles. Estos pueden incluir, entre otros:
- Decidir la fecha de la mudanza (horas de salida y llegada) con contingencias para tu llegada en caso de retrasos.
- Determinar si quieres contratar un servicio de mudanzas (algo que se suele recomendar) o prefieres encargarte tú solo.
- Encontrar una empresa de mudanzas. Solicita un presupuesto por escrito a cada empresa con la que te pongas en contacto y asegúrate de que sean legales. Para ello comprueba los registros comerciales pertinentes.
- Decidir el presupuesto. Obtén siempre un presupuesto final y asegúrate de reservar algo de dinero para poder hacer frente a cualquier imprevisto, como tener que comprar cajas adicionales, artículos olvidados o contratar al camión de mudanzas durante más tiempo.
- Informar al trabajo y el colegio sobre la mudanza. Puedes pedirles que envíen la información necesaria, como las notas y las vacunas puestas, al nuevo colegio en caso de ser necesario. Es posible que el departamento de recursos humanos de tu empleador también necesite otra información.
- Hacer un inventario de todas tus cosas para asegurarte de que todo llegue a la nueva casa. La mudanza también te servirá para deshacerte de cualquier cosa que ya no necesites.
Consejo práctico: Guarda y organiza capturas de sitios e información similar de posibles empresas de mudanzas con Web Clipper—y guárdalas con el resto de tu lista de tareas de mudanzas.
Prepárate para la mudanza
Si tienes claras las fechas y los conceptos básicos, puedes dedicar el resto del tiempo a realizar los preparativos formales. Al igual que con tu planificación inicial, los detalles variarán, pero seguramente incluirán:
- Ultimar el acuerdo con la empresa de mudanzas, incluida la confirmación de los detalles y asegurarte de que el contrato esté bien.
- Asegurarte de tener todas las cajas y demás cosas que necesitas, incluidas cintas adhesivas, envoltorio de burbujas, mantas protectoras, etc.
- Anotarlo todo. Intentar acordarte de todo de memoria durante la mudanza en sí puede ser imposible. Un archivo organizado, sobre todo uno al que puedas acceder fácilmente en una aplicación como Evernote, puede ser tu salvavidas si necesitas recordar algo sobre la marcha.
- Organizar toda la casa, y tirar lo que no necesitas o no puedes llevarte contigo. Podrás deshacerte de todo lo que no necesites vendiéndolo en aplicaciones, donándolo a organizaciones benéficas locales y lugares similares.
- Medir todos tus muebles y las puertas de la nueva casa. ¡Asegúrate de que caben! Si no, deshazte de ellos antes de mudarte.
- Rellena un formulario de cambio de dirección, ya sea en la oficina de correos o en línea. Asegúrate de informar a las empresas pertinentes sobre tu mudanza: bancos, tarjetas de crédito, compañías de seguros y empresas de servicios públicos.
«¡Nunca es demasiado pronto para empezar a embalar! Puedes comenzar guardando «artículos similares» en la habitación correspondiente para que cuando embales, lo hagas de manera organizada. Siempre que puedas, evita mezclar artículos de diferentes habitaciones en la misma caja».
—Amy Payne, experta en Evernote y organizadora profesional certificada
Más notas antes de mudarte
A medida que se acerca la mudanza, te recomendamos que repases los detalles pequeños pero críticos para asegurarte de no olvidarte de nada. Luego puedes añadirlos a tu lista de verificación de mudanzas e incorporarlos a tus planes. Esto podría incluir detalles como:
- Informar a tu oficina acerca de la hora a la que tienes que irte.
- Pedirle a un mecánico de confianza que te arregle el coche, prestando especial atención al clima del nuevo lugar en el que vas a vivir.
- Terminar de embalar unos días antes. Luego haz las maletas con suficiente ropa para unos días, como si te fueras de vacaciones.
Consejo práctico:Escanea documentos importantes como contratos, recibos y otros documentos en papel al instante, para que nunca los pierdas de vista.
Embálalo todo
La idea de embalar toda tu vida en cajas puede ser abrumadora, pero estos consejos de Amy Payne, experta en Evernote y organizadora profesional certificada te ayudarán para que embalar y desembalar sea coser y cantar:
- Haz una lista de todas las habitaciones que tienes en tu casa actual y un mapa de cómo se traduce eso en tu nuevo hogar.
- Cuando embales una caja, llénala hasta arriba. Si dejas espacio en una caja, el peso de otras cajas la aplastará.
- Si tienes que embalar un artículo pequeño, déjalo anotado en el papel de periódico con un rotulador, para que cuando lo desembales recuerdes que hay un artículo dentro del papel.
- Envuelve los elementos afilados en papel y escribe «”Afilado»” en el papel para que recuerdes que debes tener cuidado cuando lo desembales.
- Haz que el peso de cada caja esté por debajo de los 20 kilos, para que puedas levantarlas fácilmente.
- Haz un inventario de lo que hay en cada caja con el sistema de colores para la mudanza de Amy y, a continuación, utiliza estas plantillas de Evernote para realizar un seguimiento de lo que contiene cada caja. También puedes usar este sistema para etiquetar la prioridad de desembalaje y sepas exactamente en qué orden abrir cada caja.
El día de la mudanza
Idealmente, todo irá sobre ruedas el día de la mudanza, o al menos tu lista de verificación de la mudanza mantendrá a raya lo obstáculos y las complicaciones. Este es el momento de prestar atención a algunos detalles de última hora:
- Comprueba que la empresa de mudanzas es la misma que la que tienes presupuestada. Esto ayudará a prevenir estafas o robos.
- Echa un último vistazo por si te has dejado algo, luego apaga las luces, cierra el agua y el aire acondicionado; cierra y bloquea las ventanas; y deja las llaves de la casa en un lugar debidamente seguro.
Después de la mudanza
Cuando hayas llegado y te estés instalando en tu nueva casa puedes concluir el proceso con algunos elementos finales en tu lista de verificación de mudanzas:
- Limpia tu nueva casa y déjala reluciente antes de desembalar.
- Crea una lista de todos los servicios públicos que tenías en tu anterior casa para que sepas a cuáles tienes que darte de alta y contrátalos en cuanto puedas después de la mudanza.
Consejo práctico: Desembalar y organizar después de una mudanza puede ser igual de estresante que la mudanza en sí. Tareas de Evernote puede ayudarte a realizar un seguimiento de todas las tareas de desembalaje con la misma eficiencia que el resto de tu lista de verificación de mudanzas.
“Ten cerca una bolsa de basura o una caja vacía para tirar todo el papel del embalaje de las cajas. Decide dónde colocarás las cajas vacías. Vete aplanando las cajas a medida que las vacíes, podrías hacerlo justo fuera de la habitación que en la que estás desembalando”.
—Amy Payne, experta en Evernote y organizadora profesional certificada
Instalarse en una casa nueva no tiene por qué ser complicado
Mudarse puede ser una aventura intimidante, pero si cuentas con una lista de verificación de mudanzas y te has preparado bien, todo irá como la seda. El uso de las herramientas y estrategias organizativas adecuadas puede ayudarte a que lo ingestionable pase a ser gestionable, y de este modo tengas una mudanza sin estrés adicional.