Con tantos deberes, trabajos finales y exámenes, es normal que los estudiantes vayan de cabeza. Tanto si se trata de “Introducción al álgebra” como si es “Teorías avanzadas de macroeconomía”, disponer de una aplicación sólida te ayudará a aliviar el nivel de estrés al consolidar todas tus tareas diarias en una lista coherente y ayudarte a gestionar tus deberes y tu vida más fácilmente.
Protege tu energía
Las aplicaciones de gestión de tareas te permiten gestionar tus listas de tareas pendientes desde el teléfono, la tableta o el portátil. Así que, ¿por qué malgastar energía organizando el día con lápices de colores y notas adhesivas si puedes organizarte más fácilmente con una aplicación? Con una variedad de herramientas, las aplicaciones de gestión de tareas te ayudan a organizar y priorizar tus tareas diarias, liberando tiempo y energía para ti.
Priorizar es una habilidad importante que debes dominar. Los estudiantes suelen tener múltiples tareas en ciernes, desde trabajos de una página hasta proyectos de grupo. Saber priorizar simplificará considerablemente el proceso de gestión de tareas.
Con una aplicación de gestión de tareas, te olvidarás de gastar energía planificando la jornada. Por ejemplo, ya no tendrás que preocuparte de si pierdes una lista de tareas pendientes. Al tenerlo todo almacenado de forma segura en la nube, podrás acceder a tus cosas desde cualquier dispositivo y centrarte en lo importante.
¿Y qué pasa cuando usas la última hoja tu libreta física? En las aplicaciones de gestión de tareas nunca llegas a la última hoja. Por más obvio que parezca, a la larga te ahorrará tiempo y energía.
Ahorra tiempo con un gestor de tareas
Siempre nos gustaría disponer de un poco más de tiempo para divertirnos, jugar, hacer lo que nos apetezca al margen del trabajo o la escuela. Las aplicaciones de gestión de tareas ayudan a ahorrar tiempo al priorizar y centrar tu atención donde es necesaria.
Es fácil enfrascarse en la tarea de escribir un artículo o investigar un proyecto y de repente ver que han pasado varias horas sin ningún progreso sustancial. Las aplicaciones de gestión de tareas te ayudan a tener una visión general y te ofrecen una vista panorámica de todo lo que tienes que hacer. De esta manera podrás repartir tu tiempo de manera más efectiva y evitar la temida “noche en vela”. Si no tienes que entregar ese trabajo final hasta la próxima semana, dedica una hora hoy, otra hora mañana y, antes de que te des cuenta, lo habrás acabado.
Programar descansos en tu aplicación de gestión de tareas también te ayudará a hacer más cosas. Piensa en los descansos programados como algo hacia lo que trabajar durante el día, un objetivo, si quieres. Hacer descansos aleatorios cuando te apetezca puede alterar tu rutina y reducir tu productividad. Y aunque es saludable alejarse unos minutos, sobre todo si has estado ante la pantalla del ordenador demasiado tiempo, es importante programar esos descansos en tu agenda para cerciorarte de que te ayuden más que obstaculizarte.
Las aplicaciones de gestión de tareas también te permiten decidir qué hacer a continuación. Digamos que tienes muchas tareas pendientes. Tras completar la primera, es posible que no sepas con cuál seguir. Organiza estas asignaciones en tu aplicación de gestión de tareas y olvídate del problema. Podrás pasar de una tarea a otra sin pensar. Lo más importante es que estés priorizando las tareas más importantes sin necesidad de pararte a pensar. Tu yo del futuro lo agradecerá más delo que puedas imaginar hoy.
Céntrate en las cosas que importan
Las fechas de finalización te perseguirán durante el resto de tu vida, así que lo mejor que puedes hacer es priorizar tus tareas en función de las fechas de finalización. No hay necesidad de estresarse por algo que tienes que entregar en dos semanas; es más importante lo que vence en 48 horas. Si lo haces hoy, dispondrás de 24 horas para cualquier edición o cambio de última hora.
Mark Twain dijo: “Si tienes que tragarte un sapo, lo mejor es hacerlo a primera hora de la mañana. Y si tienes que comerte dos, lo mejor es que te comas el más grande primero”. Para los estudiantes, el “sapo” suele ser la tarea que debe hay que entregarse al día siguiente o incluso esa misma tarde. Seguro que no querrás anteponer tareas menos importantes.
El sapo también puede ser la tarea que más tiempo requiera. Dado que los niveles de energía mental son más elevados a primera hora del día (antes de haber comenzado con tareas más pequeñas), lo más recomendable es que te centres en los proyectos más importantes entre el desayuno y la comida.
Tu horario de clases va a ser el mayor obstáculo, ya que no puedes (¡o no debes!) concentrarte en otras tareas mientras estés en medio de una clase. Los estudiantes de secundaria suelen tener clase de 09:00 a 17:00 con pequeños descansos para hacer deberes, por lo que si tienes la aplicación configurada y lista para usar cuando llegues a casa te será muy útil hacer la tarea más importante. Los estudiantes universitarios tienen más libertad de movimiento ya que su horario de clases semanal va cambiando. Pueden utilizar el tiempo libre entre clases para centrarse en las tareas; sobre todo si trabajan después de la universidad.
Más allá de lo académico, las aplicaciones de gestión del tiempo te dejan más tiempo para tu vida personal y social. Visualizar el día completo te ayuda a sacar tiempo para el ocio. Si estás al día y trabajas en tus proyectos en orden, los terminarás más rápido. La única pregunta que tendrás que hacerte es: “¿Qué voy a hacer con tanto tiempo libre?”
Consejo práctico: Ordena tus tareas por nota, fecha de finalización o estado y utiliza filtros para ver solo lo que necesitas. Usa avisos para distinguir tareas urgentes de aquellas en las que puedes trabajar más adelante. Recibe recordatorios cuando una tarea requiera tu atención, incluso cuando no estés en la aplicación. ¿Y lo mejor de todo? Los cambios que realices en tus tareas se actualizarán al instante en cada vista, en todos tus dispositivos.
Acaba con la procrastinación y las multitareas sin sentido
Probablemente hayas oído alguna vez la frase, “trabaja de manera más inteligente, no de más”. Las aplicaciones de gestión de tareas te llevan rápidamente a la zona “inteligente” al permitirle clasificar las tareas por importancia y tipo. Esto también ayuda a vencer la procrastinación, porque ahora estás asumiendo la responsabilidad.
Es fácil postergar las cosas cuando no están escritas. Sin embargo, es difícil ignorar las notificaciones que aparecen en la aplicación de gestión de tareas que te avisan sobre los próximos plazos y las tareas que todavía no has completado. Si bien las aplicaciones de gestión de tareas pueden hacer que la vuelta a clase sea menos estresante, ¡mucho sigue dependiendo de TI!
A veces, los estudiantes tratan de hacer demasiado. Piensan que hacer varias tareas a la vez les ayuda cuando en realidad es todo lo contrario. Por ejemplo, no te servirá de nada trabajar en los deberes de matemáticas mientras revisas las diapositivas de la clase de lengua. Las aplicaciones de gestión de tareas te ayudan a tener una visión general. Si has planificado toda la semana, sabrás que si pospones un proyecto todo tu plan se irá al traste.
Consejo práctico: Utiliza la plantilla de agenda semanal de Evernote para planificar tus tareas y actividades semanales. Personalízala con códigos de colores, casillas de verificación e incluso emojis y captar tus prioridades de un vistazo.
Se acabó el estar siempre trabajando sin nada de diversión
Si bien las aplicaciones de gestión de tareas ayudan a priorizar y organizar proyectos, también permiten programar descansos. Ya hemos comentado lo importante que esto es, pero cómo pases este tiempo libre determinará si son efectivos o no.
La Técnica Pomodoro, acuñada por Francesco Cirillo, hace hincapié en los temporizadores y los descansos para aumentar la concentración y reducir el estrés. Programa un temporizador de 25 minutos (lo que equivale a un “pomodoro”), trabaja sin parar y descansa durante cinco minutos antes de volver a ponerte. Tras cuatro sesiones, tómate un descanso más largo. Puedes hacer algo rápido y divertido durante estos pequeños descansos, como tomar un refrigerio o mirar el teléfono. Tu descanso más largo será tu momento de desconexión, tu reset. Sal a caminar, lee un libro o túmbate un rato.
No aproveches estos descansos para hacer otras tareas o deberes. El objetivo de los descansos es hacer algo para equilibrar el estado de ánimo entre trabajo y diversión. Si usas los descansos para trabajar en otra cosa, acabarás desvirtuando su finalidad.
Consejo práctico: El widget de calendario de Evernote facilita la gestión de tus pomodoros. Reserva tiempo en tu agenda y a continuación vincula las notas que contienen tus materiales de estudio al evento. La aplicación te recordará cuándo debes empezar a trabajar y podrás abrir tu nota con un solo clic para empezar.
Las aplicaciones de gestión de tareas sitúan tu lista de tareas en la palma de tu mano. Puedes organizar y priorizar las tareas más importantes con un sistema de avisos, fechas de finalización y recordatorios, y confiar en las notificaciones de la aplicación para estar al día.
Si sigues tu agenda, dispondrás de más tiempo para divertirte y relajarte, y saber que has terminado tus tareas más importantes con tiempo hace que el resto del día sea significativamente más agradable. Siempre que puedas mantener a raya la procrastinación, una aplicación de gestión de tareas efectiva te ayudará a modificar tus deberes y sacar un sobresaliente.