La lluvia de ideas es una de las mejores formas de generar ideas y resolver problemas, solo o en grupo. No existe ninguna otra cosa que pueda reemplazar el flujo de ideas libre e improvisado, pero esto no significa que no debas ser previsor. A continuación se muestran algunos consejos y técnicas para sacar el máximo provecho de tus sesiones de lluvia de ideas.
Haz una lluvia de ideas de tu lluvia de ideas
Si te piden que dirijas una lluvia de ideas de un equipo, pero es la primera vez que lo haces, la preparación es clave. Además de querer centrar gran parte de tu tiempo antes de la lluvia de ideas en la estrategia y la investigación de tu tema, también debes dejar que el mundo sea tu inspiración. Utiliza Evernote para guardar cualquier información potencial que encuentres en tu día a día, tanto si vas de camino al trabajo, en la clase de Pilates o leyendo las noticias.
Rompe el hielo antes de empezar con la lluvia de ideas
En cualquier lluvia de ideas suele haber un número reducido de personas que son las que más hablan, mientras que otras sólo lo hacen cuando se les pregunta. Para ayudar a que todas las personas de la sala hablen, empieza rompiendo el hielo diciendo algo como: “Di algo sobre ti que podría sorprender a la gente”. Las respuestas pueden preparar el ambiente y forjar vínculos rápidamente, creando el entorno seguro y cómodo crucial para una lluvia de ideas efectiva.
Recuerda a tu grupo (o a ti mismo, si lo haces solo), que trate cada idea con respeto, y que den su apoyo en lugar de destrozar ideas inusuales. Si trabajas con un grupo, establece límites de tiempo para hacer que las ideas fluyan y asegúrate de que hay tiempo para todos. Deja que las chispas e ideas nuevas vuelen, pero intenta no profundizar demasiado en una sola idea a expensas de la lluvia de ideas colaborativa.
Una vez que haya sentado las pautas, presenta claramente el problema o reto. Pregunta al grupo: “¿Qué es el éxito?” Tómate tu tiempo para ver qué hacen tus competidores para ver qué merece la pena emular y qué no.
En lugar de pedir respuestas, también puedes utilizar la técnica “starbursting”, donde las preguntas suscitan nuevas preguntas. Por ejemplo, al pensar en una nueva oferta de productos, preguntas como “¿Qué características debemos incluir?” o “¿Cómo sería nuestro cliente?”, ayudan a todos a tener una idea nueva.
Jeff Sanders, un coach líder en productividad, usuario de Evernote y autor del libro best-seller de Amazon sobre productividad, The 5 AM Miracle: Dominate Your Day Before Breakfast, tiene una libreta lista para capturar la idea que a menudo llega durante una sesión de lluvia de ideas. “Programo bloques de tiempo enfocados para las sesiones de lluvia de ideas creativas y de resolución de problemas”, dice, añadiendo: “Prefiero bloques de 30-60 minutos donde puedo centrarme exclusivamente en responder una pregunta que resuelve un problema en mi proyecto actual. Registro cada idea nueva en una nota nueva para capturar todo el proceso”.
Haz que todo el mundo participe
Aparte de adherirte a los límites de tiempo y poner un límite a las discusiones largas, puedes equilibrar la participación de los asistentes con estas técnicas:
- Genera un mapa mental. Un mapa mental es una forma de visualizar y analizar tu meta, tarea o reto. Puedes crear un mapa mental con lápiz y papel o utilizando una de las varias aplicaciones de elaboración de mapas mentales disponibles. O bien, abre una nota para capturar rápidamente las ideas a medida que la representación visual de tus pensamientos colaborativos toma forma.
- Escríbelo. Haz que la gente anote las ideas en un trozo de papel. Si estableces un límite de tiempo y pides ideas de forma anónima, la gente tendrá menos tiempo para alardear o preocuparse por lo que otros piensen de sus ideas.
- Rondas. Haz que el grupo se ponga en círculo. Una vez que se presente el tema, cada persona debe decir una idea, que el moderador registra. Nadie debe evaluar las ideas hasta que todos compartan la suya.
- Escalera. Esta técnica es útil cuando tienes líderes en tu grupo que pueden intentar dominar la conversación. Como moderador, compartes el tema y todo el mundo sale de la sala, exceptor dos miembros del equipo. Después de comentar sus ideas, otro compañero de equipo se une a ellos y presenta su idea a los otros dos antes de que los dos anteriores comenten la suya. Este proceso se repite hasta que todo el mundo esté de nuevo en la sala, compartiendo todas las ideas juntos.
- Pásalo. Concede 30 segundos a cada persona para escribir una idea en una hoja de papel y después haz que se la pasen a la persona de al lado, que añadirá la suya. Haz que la hoja de ideas recorra la sala hasta que todo el mundo haya añadido sus ideas. Ver las ideas de los demás ayuda a generar otras nuevas, y escribirlas en lugar de decirlas en voz alta puede resultar más fácil para los colaboradores tímidos. Esta es otra forma para que los participantes compartan ideas y las puedas añadir a tu libreta de lluvia de ideas con Evernote.
Mézclalo
Haz que tu lluvia de ideas sea divertida y atractiva celebrando tu reunión en un lugar divertido. Un cambio de ubicación fomenta el pensamiento visual, desempeñar papeles nuevos y llevarlo al límite. Estas son algunas ideas:
- Mantenla fuera de la oficina. Ir a un espacio único, como una sala de conferencias en un zoológico, museo o teatro local. Cualquier lugar que no sea tu ambiente de trabajo habitual puede hacer que los engranajes empiecen a moverse.
- Sé hábil. Olvídate de las palabras y haz que tu equipo dibuje o dé forma a sus ideas con materiales de arte, juguetes (Play-Doh® es uno que está bien), u objetos encontrados, a continuación, haz fotos para capturar el momento. También puedes enviar a todos a una búsqueda del tesoro por la web de 10 minutos con Evernote Web Clipper y ver qué gemas visuales descubren.
- Juego de roles. Invierte el rumbo y comenta puntos de vista opuestos, o pídele a tu grupo que exprese ideas desde perspectivas externas. “¿Cómo gestionaría esto un niño de cinco años?” o “¿Qué haría Luke Skywalker?” son formas geniales para conseguir ideas.
- Llega al límite. Prueba la técnica “Edgecraft” de Seth Godin. En lugar de centrarte en tu negocio principal, por ejemplo vendiendo asientos de avión, haz una tormenta de ideas sobre las cosas de tu negocio, como qué tipos de snacks únicos podéis ofrecer durante el vuelo. Empezarás a ver tus problemas desde otra perspectiva.
Mantén el ritmo
Jeff Sanders nos dice: “Después de una tormenta de ideas, las consulto todas y saco sólo las mejores para guardarlas en una libreta específica del proyecto.”
Para hacer que todo siga fluyendo, animo a todos a seguir haciendo tormentas de ideas por su cuenta o en grupos pequeños, añadiendo ideas nuevas, bocetos y contenido web, lo que les venga a la imaginación cuando vuelvan a sus mesas.
El seguimiento también es importante. Asegúrate de que las personas responsables de los resultados posteriores a la tormenta de ideas entiendan sus papeles y las expectativas del equipo, y vuelvan los hitos clave a medida que se implementan ideas nuevas. Siempre puedes planificar otra tormenta de ideas de grupo si la gente se queda atascada.
Consejos para sacar el máximo provecho de Evernote para tu tormenta de ideas
- Prepárate para tu tormenta de ideas abriendo una nota para capturar rápidamente las ideas y guardar las fotos que has hecho.
- Guarda rápidamente los artículos, imágenes y vídeos que encuentres en la web con Web Clipper.
- Consulta las aplicaciones de elaboración de mapas mentales disponibles que se integran con Evernote, como por ejemplo ConceptDraw MINDMAP.
- Si tu equipo utiliza Evernote, pídeles que registren y compartan sus ideas de “Escribirlo” o “Pásalo”. Esto puede formar parte de tu libreta de ideas.
- Crea una libreta compartida posterior a la tormenta de ideas, en la que tu equipo pueda seguir añadiendo ideas nuevas, bocetos, imágenes y contenido web una vez finalizada la tormenta de ideas.
El final de la tormenta de ideas es sólo el principio. Termina agradeciéndoles todos por su participación. Tu sincero agradecimiento hará que la gente se sienta bien por sus contribuciones y sentará las bases para realizar sesiones de tormentas de ideas positivas y productivas en el futuro.